viernes, febrero 29, 2008

Holocausto.

Un israelí muerto y treinta y dos palestinos, ocho de ellos niños, han fallecido en dos días…yo no tengo ya palabras para describir tanto odio.
El término holocausto, después de 70 años sigue estando dolorosamente presente:
"Los palestinos atraerán sobre sus cabezas un holocausto", palabras del viceministro de Defensa israelí para advertir a Hamás por sus ataques con cohetes.

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El holocausto continúa.
José Saramago. El País - Madrid.
Era mi intención escribir un artículo sobre la situación de Oriente Próximo y enviarlo al periódico que dirige y del que soy atento y persistente lector.
Tenía ya el título preparado para encabezar la página cuando me di cuenta de que el tal artículo sería inútil por redundancia, ya que en el título estaba contenido todo lo que quería decir. Juzgue, señor director, por sí mismo: "Mientras haya un palestino vivo, el holocausto continúa".
¿Qué le parece? ¿Me permite rogarle la publicación de esta brevísima carta en la sección respectiva? Le quedaría eternamente agradecido.
José Saramago.
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O puede ser que todo se reduzca a instintos como dice El Roto.

lunes, febrero 25, 2008

Lápices para la PAZ se prepara para los Campamentos Saharauis.

Glana, una niña de 4 años, mira los últimos rayos de sol en el campo de refugiados de Smara. Como telón de fondo, la jaima de su familia.

El pueblo saharaui es conocido como los hijos de las nubes, pastores nómadas que seguían a las nubes a través del desierto durante semanas esperando la lluvia. Hace más de 30 años que siguen esperando otra quimera, la independencia de su patria. En 1975, con Franco en su lecho de muerte, tropas marroquíes y mauritanas invadieron el Sáhara Occidental (con el consentimiento de España) para dividir la antigua colonia española. Desde su partida del Sahara Occidental en 1975, dos generaciones de saharauis nacieron y viven una existencia indigente en los inhóspitos y descoloridos campos de refugiados de Tinduf, en Argelia. Allí, los saharauis permanecen en un estado de perpetua provisionalidad. Aproximadamente 150.000 saharauis viven en campos de refugiados cerca de la ciudad fronteriza de Tinduf. Estos campos están ubicados en el jardín del diablo, una sección de la hamada argelina barrida por el siroco, donde la temperatura puede subir hasta los 55 grados. Aunque han sido capaces de organizarse en los campos y conseguir un acceso limitado a la educación y la salud, el pueblo saharaui depende de la ayuda internacional que cada año es menos fiable. Informes del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados advierten de que los fondos están bajo mínimos.

Foto y texto de Nacho Hernández, fotógrafo participante del XI Premio Internacional de Fotografía Humanitaria Luis Valtueña.

Debido a los recientes y tristes acontecimientos en el Kurdistán iraquí y las dificultades con que nos encontramos para llevar la ayuda escolar, hemos decido posponer nuestro viaje a Irak. Pero esto no nos supone quedarnos quietas.
Lápices para la PAZ se dirige a los hijos de las nubes el próximo 14 de abril. Pone rumbo a un pueblo ignorado por los sucesivos gobiernos democráticos españoles, desoyendo sistemáticamente las reclamaciones de justicia, no sólo del Pueblo Saharaui, sino de miles de ciudadanos del estado español. Este abandono a su suerte, de 30 largos años, nos encontramos aproximadamente con 200.000 personas, mujeres niños y jóvenes que viven en situaciones extremas en la zona más inhóspita del desierto, con la mayor dignidad y a la espera del ansiado referéndum.

Quiero destacar el logro significativo del Frente Polisario al haber conseguido la escolarización del cien por cien de la población en edad escolar. Un éxito sin precedentes, dada las precarias situaciones como la falta de edificios escolares y material de enseñanza, con maestros escasísimos y sin apenas formación adecuada y en un ambiente bélico y de exilio. Por todo esto es imprescindible la ayuda humanitaria y la perdurabilidad de la educación.

Desde aquí hago un llamamiento a todas y todos aquellos que queréis colaborar con los niños de las nubes, con los niños saharauis.
Sólo recordar que Lápices para la PAZ es un proyecto de personas que creemos en un mundo más justo y nos movilizamos por esta causa. Y como lo fue en Palestina llevaremos la ayuda de persona a persona, de tu a tu, como se ha hecho hace miles de años, sin intermediarios.

Estamos recogiendo diverso material escolar en Madrid. Lápices de colores, gomas de borrar, rotuladores, plastilina, sacapuntas, (Libros de texto no)..etc.
Sólo tenéis que mandarlo por correo o llevarlo personalmente a la siguiente dirección:

Sección Sindical CC.OO.
Hospital General Universitario Gregorio Marañón
C/ Doctor Esquerdo, 46
28007 Madrid
O si por lo contrario queréis aportar algún donativo:

Cuenta bancaria, a nombre de la ONG Infancia Solidaria, donde puedes ingresar, mediante transferencia o ingreso en efectivo, tu donación:
La Caixa 2100.4179.93.2200045563
Poner en concepto: Sáhara “Lápices para la paz”.

Una vez realizado tu ingreso, y a efectos de la desgravación fiscal del 25% de tu aportación, deberás remitir un correo electrónico a is@infanciasolidaria.org con tu nombre, dirección postal y NIF.
Todo esto antes del 10 de abril del 2008.

Por la infancia y la educación y porque ¡otro mundo sí que es posible!.

miércoles, febrero 20, 2008

Graduado en ética.


Siempre me ha causado un gran respeto el arte antiguo, milenario. Testigo protagonista de nuestros orígenes que perdura a través de cientos de años. Es un profundo respeto hacia nuestros antepasados, por el valor humano, histórico, de lo que representa, de lo que nos dice y descubrimos.
Me impresiona la enorme fragilidad de estos testimonios culturales que perecen, aún preservándolos de los agentes que los erosionan como el tiempo, el clima, la luz...
¿Tenemos que recordar que todo elemento cultural es trascendente? ¿Que puede ser la llave, la clave de una respuesta, una pista de nuestros ancestros?.

Me ha espantado la triste noticia de los infames graffitis que aparecieron en las pinturas prehistóricas de 6.000 años de antigüedad en la cueva del Diablo, en el Sáhara Occidental, uno de los mayores yacimientos rupestres prehistóricos del sur del país.

Joaquim Soler, investigador de la Universidad de Girona descubrió como un tal Mahmud, un oficial egipcio, o Issa, un keniano, habían grabado sus nombres, sin ningún pudor y consideración en las paredes donde aparecían las pinturas prehistóricas. Estos actos vandálicos fueron realizados por oficiales de la ONU. Cascos azules destinados en el Sáhara Occidental para controlar el cumplimiento del acuerdo de paz entre Marruecos, que mantiene el control sobre gran parte de la región, y el Frente Polisario, que lucha por la independencia del Sáhara Occidental.


Leo con estupor que Issa, el keniano, se había graduado en ética del mantenimiento de la paz en una academia militar.

Quiero enfatizar en el tema respeto, en la máxima deferencia con los valores culturales. Los términos "comprensión", "cooperación" y "paz internacionales" deben considerarse como un todo indivisible, fundado en el principio de las relaciones amistosas entre los pueblos y los Estados que tienen sistemas sociales y políticos diferentes.
Quisiera destacar el término “ética” y sus sinónimos como conducta, moral, norma, comportamiento. Éstas, no son meras palabras, tienen un peso importante que se adhiere a nuestra propia educación como seres humanos, como personas inteligentes que diferencian las acciones correctas, las permitidas, las malas.

Me pregunto si Issa habrá presumido alguna vez de su graduación en ética. Quizás ese título está destacado en negrita dentro de su currículum militar. Al leerlo suena bien, nos hace formarnos una imagen de un gran profesional en relaciones humanas, responsable de sus actos, conducta intachable.
Pero no es más que mera imagen, que de forma global salpica a otros oficiales de la ONU sumándose a otras pintadas y firmas de casi tres metros que tapan valiosísimos dibujos prehistóricos. Nombres y apellidos. Reconocibles, sin tapujos, sin ningún pudor.

Lo triste de esta historia es el expolio que ha sufrido el patrimonio del Sahara Occidental desde hace años de forma sistemática. Una violación constante de una joya de inalculable valor en mitad del desierto, según dicen, un museo abierto las 24 horas del día. Puede ser el más grande del mundo, y sin duda alguna, es uno de los yacimientos prehistóricos más importantes conocidos.

El patrimonio cultural de este pueblo, de la humanidad, ha sido violado. Y esta total falta de consideración por la cultura, la historia de nuestros antepasados nos ha afectado a todos de forma global. Y es así, todos perdemos, a todos nos han expoliado, y ese título de ética seguirá formando parte del currículum de Issa. Ahora sólo queda esperar si alguien decide manchar su expediente con otro vergonzoso e inmoral graffiti.


Más: UNESCO evaluará los daños de los cascos azules a yacimientos rupestres del Sahara

viernes, febrero 15, 2008

Ese maldito semáforo.

Siempre es lo mismo.
Ese maldito semáforo se pone en verde antes de que me de tiempo a cruzar el asfalto. ¿Cuánto tarda? ¿un minuto, medio minuto?.

La ciudad, esta enorme urbe de cacas de perro y escupitajos por las aceras no está hecha para endebles viejos como yo.
Esta jaula infame, desprovista de humanidad y repleta de barreras estandarizadas hacen de una aventura extrema que jubilados, discapacitados o simplemente personas que vayan caminando sin prisas, se convierta en una ardua labor atravesar la carretera a tiempo, sin que nos piten los coches impacientes por arrancar, sin que la prótesis de cadera te avise que la llevas hace un par de años y mucho ojito con desgastarla que como andes listo, otros cuatro meses de espera para recambiártela.
Ignominiosa ciudad de hormigón sin sentimientos donde nadie le importa a nadie.

El maldito semáforo se abre, riéndose en tu cara, de tu vejez, de tu incapacidad y de tu mísera existencia. Los jóvenes corren, aceleran el paso y cruzan sin problemas. Ya llegareis a viejos, ya.

Y os preguntareis dos veces antes si merece la pena salir por la ciudad. Por las frías e inhóspitas avenidas, mirando de reojo los enormes escaparates del museo del jamón. Haciéndose la boca agua y rascándote el bolsillo por si encuentras algún euro entre las costuras.

Pero sólo encuentras el consabido recuerdo de esa desgraciada pensión que hace obligarte rebuscar entre los contenedores del Carreforur exprés o ser un eventual turista de los mercadillos tradicionales de frutas, hortalizas, ropa de imitación y perfumes robados. Esperando para que recojan los camiones y alguien se apiade de ti y te de lechugas con alguna hoja podrida o manzanas llenas de golpes.

Comer de la basura se está convirtiendo en una práctica cada vez más habitual entre los jubilados españoles. Ese ahorro me supone llegar a final de mes con menos apreturas.
Cada día hay más competencia en los contenedores de las tiendas. Nos disputamos los filetes de ternera caducados entre inmigrantes recién estrenados en la tierra prometida de occidente.

Ni qué decir tiene que además nosotros, retirados del mundo laboral, adquirimos nuestros propios recursos de supervivencia. Decidme cómo por ejemplo ¿podría comer jamón serrano al menos, una vez cada tres meses?.
Tengo un amigo que conocí en El Retiro cierto día. Me sugirió contratarle para que por un módico precio me robara el jamón del bueno, nada de paletilla descolorida y lonchas finas como el papel. No. Él visitaría unos de los grandes centros comerciales donde la primavera y las navidades siempre se adelantan, y así jabugo afanado, pasaba a englobar mi humilde patrimonio de vez en cuando en el interior del precario y paupérrimo frigorífico.
Es una táctica habitual, nada ética, pero donde dos actores sacan algo en claro que nos permite llevar el día a día con algo en el estómago y al ladrón con unas monedas en la cartera, quizás para pagarse algún vicio, que se yo, ni me importa.

Dicen que dos millones de pensionistas españoles viven por debajo del umbral de la pobreza. Han tardado en publicarlo. Algunas veces he llegado a pensar que era una leyenda urbana, como esa que dicen que abandonan a los ancianos en las urgencias de los grandes hospitales en periodo estival mientras que los hijos se marchan a la playa dejando el teléfono del hotel en el bolsillo del pantalón. Al menos no nos dejan en las gasolineras como a los perros… ¿o si?
La supervivencia ya no física de barreras arquitectónicas sino la otra, la emocional está a la orden del día en personas ancianas. La sociedad, se encarga de tapar, esconder lo políticamente inestético de las ciudades. El mal trato institucional, burócrata, social, nos llegará a unos antes que a otros. La soledad va de la mano con el paso del tiempo y la indiferencia.

Y ese maldito semáforo cambiará a verde en segundos. Volverá a reírse en mi cara todos los santos días que cruce esta calle. Hasta que mi prótesis de cadera diga ¡hasta aquí hemos llegado, vejestorio!
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Un asilo para ancianos homosexuales será inaugurado esta semana en Berlín. Objetivo: evitar que los ancianos sean discriminados hacia el final de sus vidas.

miércoles, febrero 13, 2008

No comment.

Un bebé duerme en los brazos de su madre mientras descansan en un cobertizo de un refugio para desplazados en Nairobi. Según la ONU, el número de desplazados por el conflicto desatado en Kenia tras las elecciones podría ascender a 600.000. Foto JON HRUSA / EFE.


Cazados madre y cría. Los cuerpos sin vida de una ballena y su cría son arrastrados a bordo de un ballenero japonés en el Océano Antártico. Las autoridades australianas han recopilado imágenes como ésta para un próximo proceso que detenga la caza de estos animales. Foto: Aduanas australianas / Reuters


Mohamed Abou Treika, sancionado por su camiseta (Reuters).


Rehenes en una ventada del Banco provincial de Altagracia de Orituco, Venezuela. Varios asaltantes los mantenían secuestrados tras un intento de robar la sucursal; finalmente se rindieron tras intentar escapar con varios cautivos en una ambulancia. Edwin Montilva / Reuters.

Dramático rescate en Ludwighafen Foto AFP.

Soldado estadounidense exhausto en un búnker de Afganistán. Por Tim Hetherington para un reportaje de la revista 'Vanity Fair'. Imagen premiada en el World Press Photo 2007.


lunes, febrero 11, 2008

Colegio positivo.

En el colegio Gokul de Bhugaon, a 130 kilómetros de Mumbai, India, nace cada día la esperanza. Entre sus paredes alberga 53 niños y niñas, huérfanos e infectados por el VIH, aunque aún no han desarrollado el sida.
Ansiosos de educación, oportunidad, de lápices. La historia es conmovedora y llena de ilusión. Este centro les acoge, les da una oportunidad educativa. Los pequeños han estado perseguidos por la exclusión, la discriminación y la ignorancia.
El sistema inmune de los niños todavía está en desarrollo. Ellos tienen una respuesta diferente a la infección con el VIH. La carga viral de un bebé generalmente disminuye hasta la edad de 4 ó 5 años y luego se estabiliza.
Los niños también responden en forma diferente a los medicamentos anti VIH.
De cualquier manera el tratamiento, siempre que se disponga, como en la infección por VIH en adultos será mediante antirretrovirales. Existen muchos tipos con distintos mecanismos que serán utilizados en según la edad del niño y las características de su cuadro.

La organización Human Rights match ya denunció en su día que muchos niños enfermos de sida, o hijos de padres que sufren la enfermedad en India son expulsados de las escuelas o de los orfanatos y se ven obligados a trabajar en la calle, a veces como trabajadores sexuales. Esto tiene graves consecuencias, pues suele acelerar y contagiar la enfermedad.

El gobierno habla de 50.000 menores de 15 años que se infectan cada año en el país, pero nadie les toma en cuenta.

Son muchos. Esa “minoría” silenciosa se convertirá en una mayoría devastadora sin oportunidades. ¿Cómo es posible que el gobierno no actúe ante esta realidad que asola el país?
Y ante la deshumanización más sangrante de los poderosos, surge una luz de mano de los voluntarios que regentan este maravilloso colegio:
Los organizadores de Gokul indican que su escuela supone un intento de proporcionar algo de dignidad a las vidas de los niños infectados, que han sufrido todo tipo de abusos en los pocos años que llevan en el mundo.
Ver toda la galería. Fuente El mundo.

viernes, febrero 08, 2008

Con nombre de mujer.

Maima Mahamud. Creó en 1999 la Escuela de Mujeres de Dajla. Un proyecto piloto que sería replicado en los demás campamentos saharauis. Foto Hernán Zin.

Lo dicen los estudios, los informes del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, el Banco Mundial y las Naciones Unidas.
Ponen de manifiesto la clara evidencia de que la mejora de los derechos de la mujer reduce la pobreza y acelera el desarrollo económico.

Hay explicaciones: las mujeres con más estudios contribuyen más a la economía, cuando se les da la oportunidad, las mujeres del campo parece manejar los presupuestos familiares y los recursos económicos mejor que los hombres y tienden más a devolver los microcréditos.
Mujeres con un nivel más alto de formación y derechos son más conscientes de la importancia del control de la población para la familia y contribuyen más a extender el uso de los métodos de control de natalidad.

La mujer es el motor del cambio para la erradicación para superar la pobreza en la mayoría de los países. Pero la discriminación, falta de recursos, de apoyos, y la desigualdad hace que ese cambio sea lento, invisibilizado, hasta casi normalizado.

El escritor y periodista Hernán Zin nos recuerda mediante su trabajo “Mujeres que cambian el mundo”, son ellas las que con su fuerza están dando pasos importantes, no carentes de un esfuerzo ímprobo pero con enormes y espectaculares resultados.

África, Asia, América Latina …son los países de once maravillosas mujeres que están dedicando su vida a luchar por ese cambio social y necesario en contra de la pobreza, y la marginalidad.

Ahora que tristemente leo: dos millones de niñas africanas están en riesgo de sufrir una mutilación genital cada año, miro la imagen de Agnes, una de esas once mujeres y elegida como mujer del año por Naciones Unidas en Kenia, una luchadora nata, activista social de origen masai que se dedica a visitar las escuelas de su comunidad para luchar contra la ablación de clítoris. Y cambia mentalidades y es un referente de transformación social.

Por todo esto, ojalá que los líderes políticos colaboren para mejorar la situación de los países más pobres, que consideren un comercio internacional basado en la igualdad y por supuesto, cancelen deudas y tiendan una mano fuerte a todas aquellas mujeres que están moviendo el cambio para la erradicación de la pobreza.

Agnes, Alison, Urmi, Cristina, Rosemary, Guillian, Eunice, Maima, Margarita, Belén, Milred...mi admiración, mi respeto. Y a todas aquellas mujeres que luchan diariamente en la sombra.

martes, febrero 05, 2008

Invisibles, Goya al mejor documental.

La película, producida por Javier Bardem para Médicos sin Fronteras (MSF), es el retrato de cinco historias sobre tres conflictos armados olvidados y dos enfermedades silenciosas, vistas a través de los ojos de cinco cineastas.
Su realización fue más que un Goya, fue todo un premio para la humanidad.
Qué decir de este documental, de esas historias que si no se cuentan, no existen. Un trabajo para visualizar y sensibilizar a los colegios y universidades de forma obligatoria.

La falta de empatía, la falta de cordura que impera en este mundo, sobretodo de los poderosos, hace de este planeta un lugar dónde las injusticias sociales imperan, sobrepasan todos los límites del respeto al ser humano. Existe otra realidad que con un poco de interés la descubrimos en los medios de comunicación apareciendo de forma desoladora. Son como bofetadas que atraviesan el alma. No se esconden.

No me gusta la palabra "invisibles". Es desesperanzadora, hiriente. Este excepcional documental ha contribuido a difuminar esa imperceptible y dura realidad ignorada y silenciada por muchos.

lunes, febrero 04, 2008

Esperanza para 1,5 millones de personas.

Después de 11 días de caos, la frontera de Rafah ha sido clausurada en coordinación con el grupo islamista palestino Hamás y las autoridades egipcias. Sólo se ha dejado un paso abierto para permitir a los palestinos volver a pie a la Franja de Gaza y para que los egipcios que se encuentren en Gaza realicen el viaje inverso.

Posteriormente de las conversaciones en el Cairo para una posible solución de la terrible situación de los pasados días en el paso de Rafah, negociación (siempre por separado) de Hamás y la Autoridad Palestina (ANP) han llegado a un acuerdo para tener entre ambos pueblos "unas fronteras bien organizadas".

Parece ser que hay buena voluntad de sus vecinos egipcios, ya que afirman que "El Cairo nunca permitirá que la población de Gaza se muera de hambre".
Además confirman que actuarán para suministrar al pueblo palestino todo aquello que necesite. Los camiones que transportan víveres y medicamentos llegarán a Gaza desde Egipto.
El paso fronterizo de Rafah debe de ser abierto, paso que no comunica con Israel por lo tanto, es esencial para la supervivencia de estos 1.5 millones de personas que hoy permanecen de nuevo encerrados.

Sólo me queda preguntarme, una vez más: ¿Por qué ha tardado tanto en actuar Egipto ante la dolorosa situación que lleva sufriendo Gaza durante años de asedio continuado?. ¿Por qué sólo hemos visto indolentes reacciones por parte de la Comunidad árabe frente a la constante violación de los Derechos Humanos de los palestinos?.

Juegos en la valla que separaba Egipto de la franja de Gaza. Foto AFP.

Me llama poderosamente la atención esta imagen de niños palestinos que, ajenos directos o indirectos de la tensión y la precariedad de sus familias, continúan jugando, como cualquier otro niño del mundo, haciendo de tobogán con la barrera derribada gracias a un acto popular, porque los enfermos morían ya sea de hambre, falta de medicinas ya sea del aislamiento impuesto.

Toboganes, risas, niños deslizándose por esa fea chapa metálica de separación entre seres humanos, ahora convertida en un campo de distracción, de descanso.


Más: Ilumina Gaza desde tu blog.