viernes, agosto 28, 2009

No comment.

El hospital infantil Indira Gandhi es el termómetro que mide la fiebre sanitaria de Kabul. Los casos más graves de malnutrición severa se concentran en varias de sus salas. 23 niños y niñas ofrecen 46 ojos intensos de tristeza y dolor al visitante, mientras 23 madres esconden sus rostros como si se avergonzasen de la pobreza endémica en que viven, que es la responsable de los horribles cuadros médicos con que sus pequeños llegan al hospital. La foto es de Gervasio Sánchez: Niños en el tiempo.

Bibialah con su hijo Matialah, de nueve meses y 4,3 kilos de peso. (Kabul, agosto de 2009). 150 niños de cada mil mueren antes de cumplir los cinco años. Gervasio Sánchez.

Dos mujeres ataviadas con el burka hacen fotos con sus móviles durante un mitin de Hamid Karzai en Kandahar. REUTERS.

Una muchacha sostiene su pañuelo al viento sobre una colina en Kabul, Afganistán. Algún día la libertad para las mujeres sea tan real como el viento que sacude esta instantánea. Lucy Nicholson / REUTERS

Son algo mas de las 8 am y la familia de seis personas -incluyendo a un bebe de 1 año de edad- ya están acurrucados alrededor de la pipa de opio. Beg, quien tiene 65 años, respira y exhala el humo. Le pasa tubo a su esposa. Ella luego se lo pasa a su hija. Los ojos del bebé dan vueltas alrededor de su cabeza. Sus rostros están demacrados ...Una aldea de Afganistán casi todos sus vecinos son adictos al opio.

Un grupo de heridos por bombas talibanes espera al transporte en Kabul. AHMAD MASOOD (REUTERS). Una investigación realizada por la BBC asegura que existen evidencias de compra de votos y sobornos así como otro tipo de fraudes y corrupción. Miles de tarjetas de voto han sido ofrecidas para su venta por miles de dólares. Un afgano que trabaja para la BBC, y que actuó en secreto en Afganistán, pudo comprobar como le ofrecían mil tarjetas de voto a diez dólares la unidad.

Niños refugiados acuden a un camión de hielo durante una distribución en el campo Swabi en Paquistán. Cerca de 5.000 personas viven en el campamento, sobreviviendo gracias a las ayudas de Unicef. Foto, © UNICEF. Marta Ramoneda.

Paquistán, 2009. Una muchacha asiste la escuela en un campo de refugiados, en la Provincia del Noroeste Fronteriza (NWFP). Unos 877 niños están matriculados. UNICEF ayuda a proporcionar apoyo de educación a niños desplazados. © UNICEF. Marta Ramoneda.

Afganistán: Una niña escribe en la pizarra en el interior de una mezquita que sirve como escuela, en una aldea en las afueras de Herat. No hay escuelas oficiales cerca y 460 niños y niñas de las aldeas cercanas asisten a las clases en la mezquita, aunque la asistencia, en particular para las niñas, es irregular: las niñas representan el 35% de la población escolar, y se espera que apenas se mantengan cuatro años estudiando, mientras que los varones cuentan con una expectativa de ocho años de instrucción. © UNICEF. Shehzad Noorani

5 comentarios:

NOWE dijo...

No tengo palabras....un vacio se apodera de mi estómago cada vez que oigo esas palabras y veo esos ojos llenos de miseria y dolor.Quizás eso sea bueno,quizás eso signifique que aun no me he muerto por dentro,que aun no me he acostumbrado a vivir en un mundo tan injusto,lleno de avaricia y podredumbre....hasta cuando,hasta cuando vamos a estar mirando nuestro propio ombligo,cuando daremos un paso al frente en contra de este tipo de situaciones. Ojalá les podamos dejar a nuestros hijos un mundo avitado por seres humanos....

LUISA M. dijo...

Llevas razón, Alicia, en que estas fotos apenas necesitan comentario, hablan por sí mismas. Son unas hermosas fotografías que nos muestran distintos casos de injusticias sociales.
Las que más me han impresionado son la de la madre con el bebé desnutrido en Kabul y la de las dos mujeres con el burka y el teléfono móvil (¡qué contraste!).
Es necesario que miremos a nuestro alrededor más a menudo y que fotos como éstas, no sólo nos conmuevan, sino que nos hagan actuar para contribuir a remediar o paliar estas situaciones en tantos lugares del mundo.
Gracias por tu labor y compromiso.
Besos.

Anónimo dijo...

Me quedo sin palabras.....
Gracias por la entrada,

Saludos a tod@s
luisa

June Fernández dijo...

Me quedo con la de la niña y el velo al viento. Debemos hacerlo para no hundirnos. Si las personas sensibles dispuestas a luchar por un mundo mejor nos hundimos, estará todo perdido. Así que concentrémonos en ese pañuelo bailando con el viento.

Humania Television dijo...

La verdad es que Afganistán es una herida abierta que no se cerrará demasiado pronto. No hasta que entienda que el papel de la mujer y por tanto de las niñas es a la par con el del hombre y de los niños varones, sino más ya que en la fuerza de la mujer reside en futuro de cualquier sociedad mediante la nueva vida que sólo ellas son capaces de albergar.
Sería importante que el objetivo número dos del milenio, (he aquí un documental sobre el mismo: http://www.humania.tv/videoteca.php?prog=1&vid=2) pusiera especial enfásis en los países asiáticos y africanos donde la educación impartida a las niñas es escasa por no decir nula.