lunes, agosto 24, 2009

Dibujos de infancias en guerra que "siguen reescribiendo sueños".

Save the Children muestra dibujos e imágenes de niños y niñas que han vivido sus infancias en lugares en guerra y que claman por encontrar la paz. La exposición se ha exhibido en los lugares de origen de cada joven.


La exposición, que se publicará a lo largo del mes de agosto, forma parte de la campaña Reescribamos el Futuro y consta de materiales creados por algunos de los niños y niñas con los que trabajan en distintos países de todo el mundo.
Los niños y niñas siempre pagan un precio muy alto en el gran negocio que supone la guerra. Es una experiencia que siempre estará presente en sus sueños. Además no hay que olvidar que estos menores erán los adultos del mañana. Os dejo algunos testimonios.
Niño, 13 años de edad, Sudán

Soy de Chabang-Sabori, en la localidad de Kadugli. Antes de regresar a mi casa, vivía en un campo para desplazados internos en el Estado de Jartum.

La paloma simboliza la paz. Es por eso por lo que es blanca. En el dibujo, lleva colgado de su pico un libro. El libro significa educación; la paz hace posible la educación y, a su vez, la educación alimenta el desarrollo. He incluido además una bandera. En mi interpretación de la bandera, el verde simboliza la agricultura y el desarrollo, el rojo es la sangre de los mártires, el negro es la guerra y el blanco la paz.
La tierra representa la bendición para las personas. La vela simboliza la luz de la educación.
Para ayudar a construir la paz en Sudán, puedo hacer dibujos que expresen mi amor por la paz y animar a otros a vivir de la misma manera. Mi mensaje para nuestros líderes es mi gratitud por hacer y ofrecer a la paz una oportunidad.




Poema de un estudiante ugandés, Uganda

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz!
¿Dónde estás paz?
¡Te buscamos día y noche!

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz!
¿Dónde estás paz?
Queremos la paz en el norte de Uganda
Así como en otros países que viven sin paz

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz!
Tu falta ha causado muchos problemas
Corrupción, violación de niños y pobreza
Todos tus curas, soldados y líderes
Trabajan duros por la paz, paz para todos.


Durante los más de 20 años de intensos conflictos entre el gobierno de Uganda y los rebeldes, cientos de miles de personas abandonaron sus hogares para huir de la muerte y del secuestro. Desde 2002, la mayoría de ellos han regresado pero se enfrentan a una pobreza extrema. Un generación entera ha perdido la educación y no puede ahora seguir transmitiendo el conocimiento, las habilidades y los valores que acelerarán la recuperación.

2 comentarios:

Deprisa dijo...

En un conflicto los niños siempre son los que más sufren. Admiro su capacidad para a pesar de la adversidad seguir pensando que todo puede cambiar. Tienen esperanzas en el cambio. Muchos, en nuestras vidas acomodadas y lejos de todo conflicto armado hemos perdido la esperanza en todo. No deja de ser curioso este contraste.

Pero no sólo es mala la guerra, las post-guerras suelen ser mucho peores, hambre, enfermedades, miseria...

Cuando pienso en todo ello no puedo sentirme menos que agradecido por haber nacido donde he nacido y no tener que vivir en represión ni bajo el influjo de las balas.

Un saludo.

Observador dijo...

Que dura puede ser la vida de l@s niñ@s en las guerras y que admirable su capacidad para rehacerse ,ellos son los que sufren con mas dureza las sinrazones de los contendientes.
Gracias por recordarnos que debemos dar gracias por vivir en una sociedad en paz.